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Variables: Mira Ceti

Artículo publicado en el boletín "ESTELA", Nº 92, noviembre-diciembre 2000. Rogamos se cite su procedencia en caso de reproducirlo total o parcialmente.
Javier Ruiz


El 13 de Agosto de 1596, el astrónomo alemán David Fabricius descubría una nueva estrella en la constelación de La Ballena (Cetus). Al principio pensó que era una nova y, una vez que la perdió de vista, no esperó que volviese a brillar. En 1603 Bayer la incluyó en su atlas asignándole la letra griega ómicron. Posteriormente, se comprobó que la estrella había desaparecido y observaciones más cuidadosas mostraron que su brillo variaba cíclicamente. Se había descubierto la primera estrella variable y, por ese hecho, Hevelius la denominó Mira, que significa “Maravillosa”.

Posición de Mira Ceti

(El cuadrado blanco señala la posición de Mira.)

La primera determinación del periodo fue hecha por Bouillard en 1667 que lo fijó en 333 días, aunque comprobó que ni este periodo ni el brillo máximo eran los mismos en todos los ciclos. Con posterioridad, Herschel y Argelander refinaron el valor del periodo obteniendo 331d 15h.

Mira es el prototipo de las variables pulsantes de largo periodo. Todas son gigantes rojas: estrellas que están llegando al final de su vida y cuyas capas exteriores se dilatan y contraen periódicamente (su diámetro puede variar más de un 10% en el curso de un ciclo).

Mira se encuentra relativamente cerca, a unos 420 años-luz, lo cual hace que sea una de las variables más brillantes pudiendo observarse a simple vista durante el máximo. El color rojo ya nos indica que su temperatura es muy baja, de unos 2000º y su tamaño es enorme variando entre 400 y 500 veces el del Sol (si la colocásemos en su lugar englobaría la órbita de Marte)

Como ya observó Bouillard, en el caso de Mira tanto el periodo como la amplitud de las variaciones presenta irregularidades. Algunos ciclos han tenido una duración de 310 d y otros de 370 d. En el máximo, a veces llega a la magnitud 2 y en ocasiones apenas supera la 5. El mínimo suele ser más regular, situándose entre las magnitudes 8 y 10.

En la siguiente gráfica hemos representado las observaciones efectuadas por la Agrupación sobre esta estrella desde el año 1987 hasta 2000. Como puede verse, es una curva de luz muy incompleta y con muchas lagunas. No obstante, se pueden identificar los ciclos individuales así como la subida y bajada de algunos de ellos.

Gráfica

Pulsa aquí para ver una carta de comparación de la AAVSO que puedes utilizar para estimar la magnitud de Mira comparándola con la de otras estrellas próximas. En este tipo de cartas, las magnitudes aparecen sin la coma decimal (p.e. 57 significa “magnitud 5,7”). Los datos que hay que tomar son simplemente el día, la hora (U.T.) y la magnitud.

Durante el máximo puedes observar sus variaciones de luz a simple vista y, cuando se haga más débil, con prismáticos. Esperamos que con tu ayuda podamos obtener una curva de luz más completa.